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lunes, 11 de febrero de 2013

Natalia, sumerced tan linda.....


Mi nombre es Natalya Cordero nací en Bucaramanga, Colombia el 10 de Noviembre de 1990, en este momento vivo en Buenos Aires Argentina. El motivo de estar viviendo en otro país es por perseguir un sueño bueno en realidad el sueño de mi mamá pero para mí los sueños de mi mama son los míos también. El sueño de mi mamá era encontrar a su familia materna ya que hace mas de 30 años había perdido todo tipo de comunicación con ellos, y pues ella se sentía incompleta sin saber quiénes y cómo eran ellos. 
Todo se fue dando ya que en Colombia las cosas no estaban saliendo bien para mi mamá ya que se había quedado sin trabajo y pues tenía pocas posibilidades de encontrar en lo de ella porque le exigían una maestría, y no había posibilidad que ella la hiciera por motivos económicos. Entonces mi mamá se le metió en la cabeza de venirse para Argentina por muchos motivos primero para encontrar la famila segundo para conseguir un trabajo y tercero para que  yo pudiera estudiar aquí ya que aquí en Buenos Aires el estudio es mucho más barato y hay la posibilidad de estudiar y trabajar al mismo tiempo lo que no se podía hacer en Colombia. Después de tanto meditarlo ella tomo la decisión de venirse pero si yo la apoyaba y obvio le dije que si la apoyaba absolutamente.. Con el apoyo de dos ángeles como lo son mi tia y mi tio Willi mi mamá se pudo venir y yo al año siguiente.. 

Dure un año sin ver a mi mamá y fue duro para mí porque soy muy apegada a mi mamá y a mi papá pero también me dio muy duro dejar a mi papa porque el está solo en Bucaramanga.
 Pero es la mejor experiencia que he vivido a pesar de que me hace mucha falta mi Colombia linda por la gente costumbres y en especial la familia. Podrá ser que Colombia tenga muchos problemas de seguridad pero la alegría que se vive es única. 

En sí el sueño de mi mama abarca más sueños como eran los míos de poder estudiar en otro país, vivir en otro país y conocer otra cultura.. Gracias a Dios porque se nos dio la posibilidad de venir aunque nos ha tocado duro pero es una experiencia que no cambiaría por nada, además que uno aprende a valorar más las cosas y en especial Colombia.  Porque uno tanto que se quejaba de Colombia, y al estar fuera uno se da cuenta que Colombia es un paraíso no solo por sus paisajes, mares y selvas sino por su gente y calidez humana, lo que no ha sido tan facil encuentrar en Buenos Aires.

Le doy gracias a Dios y a la vida por haberme permitido vivir esta experiencia y sobretodo poderla compartir con mi mamá que es, junto a mi papa, lo más sagrado para mi.  Y le doy  gracias a Dios por mandarme dos ángeles como mis tios y por haberme permitido nacer en un país tan bello y hermoso como lo es mi Colombia Bella :)!

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